¿Quiénes somos?
Nuestra historia
Nuestra Asociación Civil “Guacamayas Calentanas” es el fruto de la visión y el esfuerzo de José Isabel Texta y su esposa Andrea Ponce. Esta organización nació de un encuentro fortuito con la guacamaya verde (Ara militaris), una especie endémica que cautivó a José durante su servicio en el Ejército Mexicano.
La asociación comenzó como un proyecto personal de la pareja, quienes se dedicaron a seguir el movimiento de las guacamayas, documentando sus hábitos y necesidades. Con el tiempo, se dieron cuenta de la disminución alarmante en la población de estas aves, lo que los motivó a buscar apoyo para su conservación.
Desde el año 2010, “Guacamayas Calentanas” ha crecido hasta convertirse en un referente regional de conservación y educación ambiental. La asociación no solo ha logrado involucrar a más del 70% de la comunidad de El Chocolate en sus esfuerzos, sino que también ha inspirado la creación del “Grupo ambiental infantil guacamaya verde”, fomentando la conciencia ecológica desde la infancia.
MISIÓN
Guacamayas Calentanas es una organización ambiental que busca promover, impulsar, desarrollar, coordinar, facilitar, dirigir o coadyuvar en la enseñanza y formación para la conservación y el uso sustentable de los recursos naturales como también la restauración ecológica, el mantenimiento y la recuperación de servicios ecosistémicos de manera a resolver y mejorar las condiciones comunitarias, tomando como base la organización social.
VISIÓN
Guacamayas Calentanas es una organización ambiental que busca promover, impulsar, desarrollar, coordinar, facilitar, dirigir o coadyuvar en la enseñanza y formación para la conservación y el uso sustentable de los recursos naturales como también la restauración ecológica, el mantenimiento y la recuperación de servicios ecosistémicos de manera a resolver y mejorar las condiciones comunitarias, tomando como base la organización social.
La unión hace la fuerza
A través de años de trabajo independiente, la colaboración entre instituciones educativas como la Universidad Michoacana, bajo la guía experta del Dr. Arnulfo Blanco, y entidades gubernamentales como la Reserva de la Biósfera de Zicuirán-Infiernillo, han sido fundamentales.
Alianzas que nos han ayudado a establecer una cooperación efectiva entre instituciones académicas y comunidades locales, trabajando juntos en proyectos que benefician a la región.
A lo largo de los años, este esfuerzo conjunto ha crecido para incluir a más instituciones, como la Secretaría de Medio Ambiente del Estado, SEMARNAT, la Comisión Forestal, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y la Comisión para la Cooperativa Ambiental, que ha jugado un papel crucial en los años recientes y que ha presentado iniciativas de prácticas sostenibles, como la creación de viveros y huertos, actividades que no solo contribuyen a la conservación de los recursos naturales, sino que también promueven la autosuficiencia y el desarrollo económico local.
Los esfuerzos de conservación para la Guacamaya verde y su entorno natural son una prioridad para las comunidades locales y las organizaciones ambientales. Estas iniciativas buscan no solo proteger a la especie y su hábitat, sino también promover prácticas sostenibles que beneficien tanto a la biodiversidad como a las poblaciones humanas que dependen de estos recursos naturales.
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